Parte 1: Comprendiendo el Cannabis Medicinal
El cannabis medicinal, a menudo denominado cannabis terapéutico, representa un sector en crecimiento dentro del ámbito de la atención médica en el Reino Unido. Esta terminología se refiere generalmente a productos a base de cannabis que tienen un uso terapéutico en contextos de tratamiento médico. Esto puede incluir una amplia gama de productos derivados de la planta de cannabis, como el aceite de cannabis y compuestos cada vez más populares como el aceite de Cannabidiol (CBD).
La planta de cannabis está compuesta por más de cien compuestos conocidos como cannabinoides. Los más conocidos entre ellos son el Delta-9-tetrahidrocannabinol (THC) y el CBD. El THC es un compuesto psicoactivo responsable de lo que los usuarios suelen llamar “colocón” asociado con el uso recreativo del cannabis. Por otro lado, el CBD es no psicoactivo y se ha reconocido por sus posibles beneficios medicinales, incluyendo condiciones como la epilepsia y el dolor crónico.
Los productos de CBD se han vuelto ampliamente disponibles en el mercado del Reino Unido, generalmente en forma de aceites, aerosoles o cápsulas. El aceite de CBD, que no produce la “colocón” típica del uso de cannabis, está siendo cada vez más reconocido como un producto de salud y bienestar. Aunque no se clasifican como productos medicinales en el Reino Unido, su popularidad ciertamente ha contribuido a cambiar la percepción del cannabis y sus posibles usos.
Parte 2: Productos Medicinales a Base de Cannabis en el Reino Unido
Los productos medicinales a base de cannabis (CBMPs) han evolucionado significativamente en los últimos años, marcando un cambio de paradigma en las actitudes de salud pública y la legislación en el Reino Unido. La decisión del gobierno en 2018 de permitir la prescripción de CBMPs en determinadas circunstancias fue realmente un punto de inflexión. Esta decisión llegó tras casos de alto perfil, como los que involucraban a niños que padecían síndromes de epilepsia graves como el síndrome de Dravet, para quienes los CBMPs habían demostrado beneficios significativos.
Tras la reclasificación del cannabis en virtud de la Ley de Abuso de Drogas, los CBMPs se clasificaron como drogas de “Programa 2”, una clasificación que abarca las drogas controladas con uso medicinal reconocido. Este cambio, respaldado por el Jefe de Medicina, significó que los médicos especialistas registrados en el Registro de Especialistas del Consejo Médico General podían prescribir CBMPs. Sin embargo, la condición es que dichas prescripciones deben realizarse caso por caso cuando se han agotado otras opciones de tratamiento.
Sin embargo, la disponibilidad de CBMPs en el Servicio Nacional de Salud (NHS) sigue siendo limitada. Solo hay un puñado de medicamentos a base de cannabis con licencia para su uso en el Reino Unido. Estos incluyen Sativex para los síntomas de espasticidad en la esclerosis múltiple, y Epidiolex para formas raras de epilepsia. También se utiliza Nabilona, un cannabinoide sintético, para tratar las náuseas inducidas por la quimioterapia. Sin embargo, la mayoría de los CBMPs aún se clasifican como “medicamentos no autorizados”.
Parte 3: El Proceso de Prescripción y la Accesibilidad
Obtener una receta de cannabis en el Reino Unido es actualmente un proceso complejo, reservado principalmente para pacientes con condiciones específicas. La vía de prescripción del NHS es estricta; los productos medicinales a base de cannabis generalmente solo se recetan cuando hay evidencia publicada clara de beneficio y se han agotado otras opciones de tratamiento. Hasta ahora, las prescripciones de CBMPs en el NHS son escasas y se reservan principalmente para las condiciones más graves y intratables. Para muchos pacientes, las recetas privadas, aunque más costosas, ofrecen una ruta más factible para acceder a estos productos.
Releaf, una clínica de cannabis de renombre en el Reino Unido, es un proveedor notable en este ámbito. Estas clínicas trabajan con médicos especialistas registrados en el Consejo Médico General y con experiencia en la prescripción de productos medicinales a base de cannabis. Para los pacientes que buscan tratamiento con cannabis medicinal, se lleva a cabo una consulta inicial para discutir su condición médica, los medicamentos actuales y los posibles riesgos y beneficios de los CBMPs.
Parte 4: Prohibition Partners, Drug Science y el Registro de Cannabis Medicinal del Reino Unido
A medida que el panorama del cannabis medicinal en el Reino Unido evoluciona, organizaciones como Prohibition Partners y Drug Science desempeñan un papel fundamental en el avance del sector. Prohibition Partners, una destacada consultora internacional del mercado del cannabis, proporciona información y estudios que informan a los interesados, formuladores de políticas e inversores sobre la industria global del cannabis.
Por otro lado, Drug Science es una destacada organización científica con sede en el Reino Unido que busca proporcionar información clara y basada en evidencia sobre drogas y políticas de drogas. Han sido fundamentales para resaltar los posibles beneficios del cannabis medicinal para afecciones como el dolor crónico y el dolor neuropático.
Se han formado consejos como el Consejo de la Industria del Cannabis para reunir a todas las empresas de cannabis de reputación bajo un mismo consejo.
En respuesta a la creciente necesidad de datos sobre el uso del cannabis medicinal y su impacto, se estableció el Registro de Cannabis Medicinal del Reino Unido. Esta base de datos registra información detallada de los pacientes, proporcionando conocimientos valiosos para la investigación en salud y para informar futuras políticas de prescripción y ensayos clínicos.
Parte 5: El Camino a Seguir y el Papel de la Investigación
El papel de la investigación rigurosa en salud y los ensayos clínicos en la configuración del futuro del cannabis medicinal en el Reino Unido no puede subestimarse. Si bien hay una gran cantidad de evidencia anecdótica sobre los beneficios de los CBMPs, se necesitan pruebas clínicas sólidas para informar a los institutos nacionales, proveedores de atención médica y pacientes sobre la eficacia y seguridad de estos productos.
El dolor crónico, el dolor neuropático y afecciones como la epilepsia y el síndrome de Dravet siguen siendo temas centrales en las discusiones sobre medicamentos a base de cannabis. Sin embargo, el potencial terapéutico de los CBMPs puede extenderse a una variedad de otras afecciones. Por ejemplo, los pacientes con cáncer han informado alivio de las náuseas inducidas por el tratamiento y una mejora del apetito después de usar CBMPs.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que el cannabis medicinal no es una panacea. Tampoco está exento de riesgos y no se comprenden completamente los impactos a largo plazo de su uso. Fumar cannabis, incluso con fines medicinales, puede dañar la salud pulmonar, y las propiedades psicoactivas del THC pueden tener efectos adversos en la salud mental.
Mirando hacia el futuro, es probable que el papel del cannabis medicinal en la atención médica del Reino Unido siga evolucionando, guiado por la investigación científica, los cambios en las políticas y las experiencias vividas por los pacientes. A medida que haya más evidencia disponible y los sistemas de atención social se adapten a este panorama en evolución, se espera que los CBMPs seguros y efectivos estén más al alcance de aquellos que podrían beneficiarse de ellos.
En última instancia, el potencial del cannabis medicinal como opción de tratamiento depende de encontrar un equilibrio cuidadoso. La tarea para el sector de la atención médica del Reino Unido es navegar por este acto de equilibrio, entre aprovechar los posibles beneficios de los CBMPs, garantizar la seguridad de los pacientes y cumplir con estándares regulatorios y éticos estrictos. El camino puede ser largo y complejo, pero la recompensa potencial es considerable: brindar alivio y mejorar la calidad de vida de miles de pacientes en todo el Reino Unido.
Via Outlookindia traducido por Dominicanna